¿Qué son las Constelaciones Familiares y para qué sirven? Una mirada desde la experiencia

Seguro alguna vez te pasó que sentís que repetís cosas sin querer… relaciones que terminan igual, conflictos que no entendés de dónde vienen, enfermedades raras que nadie explica bien. O incluso esa sensación pesada, como si llevaras encima cosas que no son tuyas. A mí me pasó, y por eso te quiero contar de las Constelaciones Familiares, algo que a mí (y a muchxs) nos ayudó a encontrar un poco de claridad.

Y si te interesa profundizar, más abajo te cuento cómo podés aprender todo esto con nuestro curso online. Es muy práctico, lo hacés a tu ritmo, y al finalizar recibís un certificado.

Pero… ¿Qué son exactamente las Constelaciones Familiares?

No es fácil de explicar en una sola frase, pero podríamos decir que es una herramienta terapéutica que nos ayuda a mirar nuestra historia familiar desde otro lugar. Más allá de lo que ya sabemos. Nos permite ver las lealtades invisibles, esas conexiones profundas con nuestros padres, abuelos, bisabuelos (¡y más atrás también!) que muchas veces siguen influyendo en nuestra vida sin que lo sepamos.

Fue desarrollada por Bert Hellinger, un terapeuta alemán, y lo que descubrió fue que muchas veces repetimos historias que no son nuestras por amor y lealtad a nuestro sistema familiar. Sí, incluso cosas que no conocemos conscientemente.

¿Cómo funciona una constelación?

Bueno, eso depende si es grupal o individual, pero en esencia el proceso tiene una lógica sencilla (aunque a veces parece mágico).

Primero, alguien plantea un tema que quiere resolver.
No hace falta contar toda tu vida, con decir algo como “me cuesta avanzar en mi trabajo”, “siempre termino en relaciones tóxicas” o “tengo una tristeza que no entiendo”, alcanza.
Después se arma la constelación.
En grupo, se elige a otras personas para representar a tu papá, tu mamá, vos, etc. En individual, se usan muñecos o papeles en el piso. La información empieza a surgir sola, como si el cuerpo de los representantes supiera cosas que la mente no. Es muy impresionante.
El/la facilitador/a va guiando.
Ahí es donde se van revelando las dinámicas. A veces alguien “está fuera de lugar”, otra vez falta una persona que fue excluida (como un aborto no hablado, o un tío que fue expulsado de la familia). El trabajo es ordenar eso, dar lugar, honrar, mirar lo que no se miró.
Frases sanadoras.
No son fórmulas mágicas, pero cuando se dicen con verdad, tocan el alma. Frases como “te veo”, “te honro”, “yo soy el pequeño, vos sos el grande”… pueden mover mucho más que años de pelea interna.
Y al final, una nueva imagen.
Lo importante es que el alma vea otra posibilidad. Eso se llama la “imagen de solución”. No es para entenderlo con la cabeza, sino para sentirlo. Y después, dejar que actúe. A veces hay cambios inmediatos, otras veces es más sutil y aparece a los días o semanas.

¿Y esto para qué sirve?

Muchísima gente llega a las constelaciones cuando ya probó de todo. O cuando siente que hay algo que no se ve pero pesa. Y sí, sirve para:

Problemas de pareja, familiares, con hijos o padres.
Enfermedades sin causa aparente.
Repetir historias (siempre te pasa “lo mismo”).
Bloqueos con el dinero, el trabajo, la abundancia.
Sensaciones raras: vacío, tristeza sin sentido, no saber quién sos ni qué querés.
Duelo por pérdidas o abortos.
Adicciones y vínculos tóxicos.
Falta de propósito o dirección en la vida.

¿Es para todo el mundo? No necesariamente. No reemplaza una terapia médica o psiquiátrica si estás atravesando algo fuerte. Pero sí puede complementar y ayudarte a entender desde un lugar más profundo lo que te está pasando.

¿Querés aprender esto?

Mirá, si todo esto te resuena y sentís que querés ir más allá, podés aprender cómo funciona desde adentro.
Tenemos un Curso de Constelaciones Familiares 100% online, que podés hacer desde cualquier lugar, a tu ritmo, sin horarios. Las clases están grabadas y podés verlas cuando quieras, las veces que necesites.

Y lo mejor: al terminar te damos un certificado, por si querés sumar a tu formación, compartir con tus consultantes o simplemente sentir que este camino lo hiciste completo.

No necesitás experiencia previa, ni ser terapeuta, ni tener estudios específicos. Es para cualquier persona que quiera mirar más profundo su historia o acompañar a otros en este camino.

Algunas preguntas que suelen surgir…

¿Tengo que saber sobre mi familia para constelar?
No. A veces sabés poco y aún así la información aparece en el campo. Es misterioso, pero funciona.

¿Es una creencia o algo esotérico?
No tenés que creer en nada. Es una experiencia vivencial. La gente se sorprende de lo que aparece aunque no lo esperaban.

¿Duele?
A veces sí, se remueven cosas. Pero no es un sufrimiento inútil, sino el dolor que sana, el que acomoda, el que libera.

¿Una constelación soluciona todo?
No, pero puede mostrarte por dónde va el camino. Y eso ya es un montón.

Para cerrar…

Las Constelaciones Familiares no son una moda ni una receta mágica. Son una forma profunda y honesta de mirar nuestra historia. A veces, lo que necesitamos no es más esfuerzo, sino más conciencia. Ver lo que estuvo oculto, abrazarlo, y desde ahí, elegir distinto.

Si sentís el llamado, no lo ignores. Mirá tu historia. Aprendé a leerla de otro modo. Y si querés formarte, acompañar a otros o simplemente entenderte mejor, nuestro curso online te puede acompañar paso a paso.

Cualquier duda, escribinos. Estamos para ayudarte ❤️